“No seas feliz solo los fines de semana. Sonríe el lunes, abraza el martes y ama el miércoles. El jueves canta y el viernes baila. La vida no puede ser limitada apenas a dos días”.
Anónimo.
¿Cuántos de nosotros solo esperamos que llegue el viernes? Pues esa frase me hizo reflexionar y darme cuenta de que yo si disfruto de todos los días, será porque amo mi trabajo y aunque se que todos son diferentes, nunca dejan de sorprenderme.
Y es porque procuro que mi felicidad no tenga fecha de caducidad, que en mi diversión no exista horario, y porque no, también hallar placer profundo en una cama, sillón o en la cocina.
Encontremos pasión en las cosas curiosas que nos dan satisfacción, placer y paz. Enamorarnos tanto de nuestro espacio que lo consideremos como algo único y exclusivo y que nuestras locuras sean un bellísimo acto de tranquilidad interior.
Vamos a divertirnos de la forma que más nos agrade y que cualquier día o noche podamos tener la casualidad más hermosa de la vida, hacer algo diferente; hoy atrévete a sonreír frente a la cámara, a seducir al espejo y ponte aún más guap@ de lo que ya eres.
Nos daremos una oportunidad: vamos a suspirar en jueves, abrir una copa de vino el lunes, ponernos sexy en martes, ir al cine en miércoles y observar las estrellas en viernes.
Y que el fin de semana sea un premio a nuestras aventuras de lunes a viernes, y el domingo sea la cereza del pastel.