Es importante que esta actividad se realice en un espacio de libertad, donde los niños sean capaces de expresarse sin límite alguno. Por esta razón, sería muy divertido y oportuno que el niño elija el lugar donde puedan pintar tranquilos. Se recomienda que sea un espacio donde no tengan problemas con el desorden o la pintura derramada.

Entre los principales beneficios que obtienen los niños por pintar encontramos los siguientes:

  • Diversión.

Es lo más importante, resulta primordial que el niño se divierta y disfrute de ese momento. Puede hacerlo solo, lo esencial es que lo vea como una actividad recreativa y no como obligación.

  • Habilidades motrices.

En este caso, sostener y manejar el pincel o el lápiz, ayudan a regular los movimientos de la mano para estimular las conexiones cerebrales. Al mismo tiempo desarrollan la motricidad fina. Esto se logra pasando la idea que tienen en su cabeza hacia las manos y luego al papel.

  • Estimulación emocional.

Cuando los niños pintan, descubren que son capaces de crear belleza. Expresan el mundo que tienen en su interior de forma autónoma. Podemos ayudarlos animándolos a superarse, buscando una evolución a nivel emocional.

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  • Imaginación.

Como se ha dicho anteriormente, pintar es la forma de expresar lo que se imagina. Consiste en desarrollar la creatividad suficiente para llenar un espacio vacío.

  • Mejora la Comunicación.

Pintar ayuda a que los niños tengan una forma de expresarse y comunicarse, pues los dibujos dicen todo. Es muy valioso principalmente para aquellos niños que tienen problemas para expresarse. Útil en niños tímidos o con ciertas discapacidades, porque al pintar no tienen la necesidad de escribir o hablar. En los dibujos expresan sus preocupaciones, debilidades, miedos e intereses.

  • Favorece la autoestima.

Es un ambiente relajado, sin competencia, donde el niño se dé cuenta de la evolución de sus dibujos. Podrán comprobar que tienen la capacidad de plasmar justo lo que quieren expresar. Esto será favorable para que su autoestima crezca.

  • Se obtiene relajación.

La pintura puede ser muy relajante para la mayoría de las personas. Es parecido a una terapia donde el niño se siente en un espacio de seguridad.

Puede hasta tornarse como vía de escape en los momentos difíciles. Por ejemplo, cuando los niños se sienten tristes, lo utilizan como medio de desahogo.

Fuente: eresmama.com